
Un juego prohibido.
Un internado donde nada es lo que parece.
Dos jóvenes atraídos por una fuerza magnética.
Un secreto oscuro y peligroso.
Y una única certeza: entregarse al amor es jugar con fuego...
Lucas me estrechó contra su pecho con tanta fuerza que apenas pude respirar. Fue un beso profundo y lento, impetuoso y delicado, mil veces distinto. Perfecto en todas sus facetas.
Se me cayó la chaqueta de los hombros y mis brazos quedaron expuestos al aire. Deslizó las manos por mi espalda para protegerme del frío nocturno y sentí sus palmas en mis omóplatos y sus dedos en mi columna. Lucas me besó en la boca, en las mejillas, en la oreja y en el cuello.
-Bianca -dijo en un dulce susurro que sentí en la piel. Los labios de Lucas rozaban mi cuello-. Deberíamos parar.

Medianoche es el primer libro de la saga del mismo nombre de Claudia Gray. ¿De qué trata? Vampiros.
En un principio la portada me trajo a la mente la saga Crepúsculo de Stephenie Meyer, obviamente por su parecido con Luna Nueva. La reseña casi me convenció de que era una historia similar, quizá para jóvenes en lugar de adolescentes. En mi opinión, cometí un error al pensar así.

Bianca se califica a sí misma como "muy tímida", cosa que no se hace notar en todo el libro. xD De regreso a la Academia, Lucas le cuenta una historia que, más tarde, va a ser el detonador del final de este libro. Pero no nos adelantemos y vayamos a los demás personajes. Patrice es la compañera de habitación de Bianca, refinada como todos los que "realmente pertenecen a Medianoche", es la típica muchacha rica que se junta solo con los de su clase sin mirar a los "marginados". ¿O no? Nada más verse ambas admiten que ninguna es lo que la otra esperaba, Patrice se apresura en dejar ciertos puntos en claro, pero siendo amable, tenemos una futura pequeña amistad en las manos.

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"El beso" de Klimt. -Lo creo, Lucas -murmuré. |
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